En primer lugar, examiné a los hombres, y llegué a la conclusión de que, en esta infinita diversidad de leyes y costumbres, no estaban regidos únicamente por sus fantasías. Montesquieu Ninguna sociedad se mantiene idéntica a la del momento en que fue fundada. No pienso en los inevitables cambios que, con el paso del tiempo y las necesidades demográficas, entre otros factores, modifican su apariencia. Lo que destaco es la imposibilidad de contar siempre con las mismas ideas. Debido al criterio que parece mayoritario entre las minorías intelectuales, uno puede creer en prejuicios capaces de afectar a casi todo un país. Así, explotando generalidades, llegamos a relacionar nacionalidades con determinadas actitudes o absurdos. En el caso de Francia, por ejemplo, su clase intelectual ha sido asociada con el antiamericanismo o antiimperialismo estadounidense. Sartre es una de las varias figuras que ilustra la idea. Em p ero , tenemos excepciones: Jean-François Revel , Raymo...
Olviden la ordinariez que infesta nuestra sociedad, los deberes preceptuados por las agendas laborales y el diplomático recurso de no insultar al prójimo... Caerse del tiempo demanda una extravagancia posmoderna: vivir, aunque sea un instante, con total libertad.