Santa Cruz de la Sierra, 19 de septiembre de 2007 - Señores Fundación Carolina Presente.- Referencia: desencanto y renuncia Con las consideraciones del caso: Tras escuchar a un entrañable amigo, decidí presentar mi solicitud para obtener una de las becas ofrecidas por la Fundación Carolina. Tomando en cuenta los trabajos intelectuales que había realizado hasta ese momento, la pretensión no parecía delirante; al contrario, lo pasado permitía esperanzarse con esta candidatura. Entre otros programas, escogí el Master en Estudios Latinoamericanos porque deseaba fondear la problemática que aflige aún a esta parte del orbe. Luego de algunos meses, me citaron para una entrevista en La Paz. Concluido el encuentro, donde dialogué largamente con J.T., estaba convencido de que mi postulación generaría consecuencias positivas. No erré al hacer este análisis, pues quedé como reserva, situación que cambiaría debido a inconvenientes que tuvo el titular para aceptar la beca. Me convertí, por tanto,...
Olviden la ordinariez que infesta nuestra sociedad, los deberes preceptuados por las agendas laborales y el diplomático recurso de no insultar al prójimo... Caerse del tiempo demanda una extravagancia posmoderna: vivir, aunque sea un instante, con total libertad.