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Mostrando entradas de julio, 2015

Nuestra vida y el rigor científico

Se cree siempre equivocadamente que  la idea de razón tiene un sentido único. Albert Camus En un curso que comenzó el año 1929, Ortega y Gasset se preguntaba sobre las razones humanas para conocer. No siendo dioses omniscientes ni, en teoría, animales inconscientes de su ignorancia, valía la pena formularnos esa cuestión. Desde Aristóteles, se sostiene que, por naturaleza, el hombre tiene un afán de conocer, una inclinación favorable a ello. Huelga decir que la conducta de mucha gente refuta esta tesis con espantosa frecuencia. No obstante, al autor de Meditaciones del Quijote le preocupaba terminar con esa inquietud, buscando una respuesta que fundamente nuestros quehaceres en dicho ámbito. Así, se afirmó que las personas conocían para tener seguridad vital; en otras palabras, necesitaban ciertas convicciones, creencias, verdades, las cuales son demandadas por un oficio tan importante como vivir. Gracias al impulso de Francis Bacon, la ciencia moderna ha servido

Entre adoctrinados y adiestrados

Por consiguiente no se trata de un adiestramiento , de una costumbre impuesta a un cuerpo, sino más bien de una disciplina impuesta a un cuerpo en el mismo momento en que está justificada con razón… Charles Pépin Con acierto, Hannah Arendt subraya que, cuando hablamos de política, debemos considerar una pluralidad, a saber: los hombres. No se trata de reflexionar sobre un solo individuo, cuyo ideario tenga que ser realizado sin atender a los demás sujetos. No somos ermitaños ni tampoco reyes de una isla deshabitada. Todos los ciudadanos son quienes conviven, dialogan, pero también discuten y, afortunadamente, pueden resolver problemas comunes. Nadie queda excluido de esas cavilaciones en torno a los asuntos públicos. Por supuesto, siendo las opiniones diversas, al igual que sus fundamentos, el adoptar convenciones capaces de regirnos es una tarea compleja. Es más, en muchas ocasiones, nuestros fracasos fueron acompañados de irrebatibles atrocidades, por lo cual, a esa dif

Hochschild, una revelación necesaria

Solo la mentira y, un poco por debajo de ella, la obstinación son a mi juicio las faltas cuyo nacimiento y desarrollo deberíamos combatir en todo momento. Michel de Montaigne Impedir el acercamiento a la verdad es un hecho que merece todo repudio. Uno entiende que, gracias a esta clase de aproximaciones, es posible mejorar nuestra realidad. En el caso de la historia, si aspiramos a conocer objetivamente lo que aconteció, es perjudicial patrocinar, peor aún con fanatismo, una sola versión del pasado. En otras palabras, no se juzga ideal que haya una única exposición de los hechos, la cual sea sagrada e intocable. Un razonamiento como éste fue planteado por Tzvetan Todorov, quien, cuando visitó Argentina, notó que se promovía sólo el conocimiento del terrorismo de Estado, quitándose trascendencia a lo sucedido con la violencia revolucionaria. Lejos de ser deseable, aquello era negativo, porque tornaba imposible realizar algo tan elemental como la autocrítica. Cuantios