Tras una revolución, se ve a los mismos hombres en los salones, y al cabo de una semana, también a los mismos aduladores. George Savile Toda persona tiene derecho a respaldar un disparate; sin embargo, el servilismo y las hipocresías serán siempre dignos de la censura. La equivocación se presenta en nuestras vidas con una frecuencia estremecedora. Nadie ignora que, hasta la finalización de sus días, el error lo acechará sin conmiseración. El problema es que, pese a tener certezas sobre la insensatez de una posición, no sólo se opte por defenderla, sino también sean empleadas las mentiras para predicarla. Éste es el caso de los oficialistas en Bolivia, algunos menos repugnantes que otros. No es una exageración sostener que pocos especímenes superan a sus agentes al encarnar el peor concepto del cinismo. No se trata de recurrir a la falsedad por tener esa vivencia; el objetivo es obtener ganancias, consolidar privilegios, incrementar favores. Incapaces de valerse por su pro...
Olviden la ordinariez que infesta nuestra sociedad, los deberes preceptuados por las agendas laborales y el diplomático recurso de no insultar al prójimo... Caerse del tiempo demanda una extravagancia posmoderna: vivir, aunque sea un instante, con total libertad.